Piscinas de agua salada vs. piscinas de cloro

Uno de los mayores conceptos erróneos sobre las piscinas de agua salada es que no contienen cloro. La sal no puede desinfectar una piscina, como a veces se cree. De hecho, la sal se convierte en cloro mediante electrólisis. La célula de sal (generador de cloro) se utiliza para producir ácido hipocloroso (HClO) e hipoclorito de sodio (NaClO), que son los agentes desinfectantes que ya se utilizan habitualmente en las piscinas. Por lo tanto, una piscina de agua salada no está realmente libre de cloro; simplemente utiliza un generador de cloro en lugar de la adición directa de cloro.

La buena noticia es que la sal tiene una ventaja sobre el cloro puro. La célula que se utiliza para generar el cloro a partir de la sal ayuda a mantener un nivel constante de cloro. Si usted mantiene su propia piscina y no tiene un sistema de sal o un inyector de cloro, probablemente esté acostumbrado a verter cloro puro en su piscina para que los niveles de contenido sean los que desea. Con un sistema de sal, la célula de sal convierte constantemente la sal en cloro a un ritmo relativamente constante. Además, el generador de sal significa que ya no tiene que comprar cloro, almacenarlo ni manipularlo.

Aunque las piscinas con generador de cloro son más sencillas en el sentido de que ya no hay que cargar con el cloro y verterlo directamente en la piscina, hay que tener en cuenta un mantenimiento considerable. Hay que ser diligente en el mantenimiento de la química de la piscina. Por lo tanto, hay que mantener los niveles adecuados de sal, y las piscinas de agua salada suelen requerir ajustes del pH añadiendo ácido muriático.

Además, la mayoría de los fabricantes de sistemas de sal sugieren un programa de mantenimiento cada 3 meses, en el que se retira la celda y se le aplica un “baño ácido”. Esto ayuda a reducir la acumulación de depósitos minerales en la celda, lo que la hace incapaz de producir cloro. Independientemente de estos procedimientos, la celda debe reemplazarse de todos modos, lo que implica un costo significativo.

Los sistemas de sal han recibido un gran impulso en el sector de las piscinas. A los propietarios de piscinas se les ha hecho creer que la instalación de un sistema de sal significará que sus piscinas estarán libres de cloro y, por lo tanto, serán más saludables. La ventaja de un sistema de sal es la comodidad de tener el cloro generado en el lugar, lo que ahorra el transporte de grandes cantidades de cloro desde la tienda hasta la piscina. Además, aunque el agua se siente más suave y delicada con la piel, hay un alto nivel de salinidad presente. Esto puede causar problemas corrosivos importantes para el equipo de la piscina.

Al decidir sobre un tipo de saneamiento, muchos propietarios de piscinas y spas intentan determinar las diferencias entre el sistema de sal y el sistema UV, y las diferencias son significativas. En primer lugar, un sistema de sal en sí mismo no realiza ninguna función de saneamiento. Primero debe convertirse en cloro mediante un generador de sal (celda de sal) mediante electrólisis. Un sistema UV no añade nada al agua de la piscina. A medida que el agua pasa por la lámpara UV-C, los rayos UV (254 nm) matan o inactivan los microorganismos, dejando el agua de la piscina o el spa limpia, clara y segura. A diferencia de un sistema de sal, no quedan elementos corrosivos en la piscina que dañen el equipo de la piscina.

La buena noticia es que aún puede utilizar su sistema de sal con un desinfectante UV. Si tiene un sistema de agua salada que actualmente funciona correctamente, no es necesario eliminarlo por completo. Con un sistema de desinfección UV, le recomendamos que mantenga un nivel bajo de cloro (0,5 PPM, estándares de agua potable). Al reducir la generación de cloro en su sistema de sal, puede mantener fácilmente la cantidad mínima de cloro. Esto no solo servirá para reducir el contenido químico de la piscina, sino que también extenderá en gran medida la vida útil de su celda de sal.

Si actualmente no tiene un sistema de sal, no le recomendamos que agregue uno solo con el fin de dispensar cloro con facilidad. Un buen inyector de cloro le resultará muy útil sin tener que agregar solución salina al contenido de agua.